Este es, hasta el momento, el pastel que más horas he tardado en hacer, con diferencia. Fue muy laboriso, un trabajo con muchísimos detalles y de muchísimas horas, pero que volvería a hacer una y mil veces más. Cuando ves el resultado después de tanto esfuerzo te das cuenta de que ha valido la pena.
Creo recordar que éste ha sido mi tercer pastel en 3d, pero ninguno de los anteriores de semejante complejidad. El tallado del barco a partir de varios bizcochos de diferentes medidas es especialmente delicado y se necesitan varias horas de enfriado para poder trabajar sobre ellos sin peligro a que se quiebren.
Todos los detallitos son de fondant, la arena es azúcar moreno y las velas están hechas de goma eva. Dentro del cofre un tesoro escondido, riquísimos caramelos.
Tanto el mar como el barco en su totalidad son bizcochos de vainilla empapados en almíbar de sandía natural rellenos de ganache de chocolate con leche.
Muchas gracias por confiar en mí para semejante tarta
¡Felicidades Albert!
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